Menorca es una isla preciosa, pero también difícil. Aquí emprender cuesta, crear cuesta y resistir cuesta todavía más. Y aun así, hay personas que deciden apostar por lo real, por lo hecho a mano y por lo que perdura. Personas como Isabel Mir, artesana que abrió su taller en Ciutadella hace seis años y que, en plena era de lo rápido y lo masivo, eligió crear despacio, con alma y con verdad.
En este episodio hablamos de artesanía, de emprendimiento y de lo que significa sobrevivir como autónomo en la España de 2025. De una multa de 20.000 € que refleja un problema mucho más profundo: un sistema que muchas veces castiga al que crea y no protege la identidad ni el trabajo artesanal. Pero, sobre todo, hablamos de resistencia, de dignidad y de la importancia de defender a quienes levantan algo desde cero con sus propias manos.
Cada taller que cierra es una derrota colectiva. Porque si un artesano no puede sobrevivir, tampoco lo hará la identidad de esta isla ni de este país. Isabel nos recuerda que detrás de cada pieza hecha en Menorca hay horas, esfuerzo y alma, y que crear no debería ser un acto de valentía extrema, sino algo que cuidar y proteger.
No te puedes perder este episodio.